jueves, 17 de marzo de 2011

JUNG, LA SINCRONICIDAD Y EL ESCARABAJO DORADO



La señora X, como cada mañana, aprovechando que su marido acababa de salir, decidió abrir la ventana para que la luz y el aire de la mañana renovaran la atmósfera de su dormitorio conyugal. Pero, al acercarse, la imagen que vio a través de los cristales la dejó helada. Temiendo lo peor, decidió acudir sin más dilación a la consulta del Doctor Jung, donde se estaba tratando su marido.

El psiquiatra y psicoterapeuta Carl Gustav Jung, al que los lectores de este blog ya conocerán por un artículo anterior, tenía como paciente por aquellos tiempos al señor X, y del que no quiso revelar su nombre por respeto a su privacidad. Sólo estaba aquejado de una leve dolencia emocional; no obstante, unos días antes, le había recomendado que visitara a su médico de cabecera porque se había quejado de molestias en el tórax y la garganta. La señora X, ya en su consulta, con un marcado tono de angustia en su rostro le preguntó si la salud de su esposo corría grave peligro. Jung, cariñosamente, intentó tranquilizarla al tiempo que le preguntó por el motivo de tanta preocupación. Y la respuesta de la mujer le llenó de curiosidad.



Ella le contó que esa mañana había visto una bandada de pájaros posada sobre el alféizar de su ventana. Lo mismo le había ocurrido justo antes de la muerte tanto de su abuelo y como de su padre, y ella lo interpretaba como una señal de luto inminente. Al poco tiempo, Jung supo que el señor X había muerto repentinamente por una lesión cardiaca, y decidió prestar atención a este fenómeno. Se dio cuenta de que este tipo de presagio personal de la señora X había sido acertado tres veces consecutivas, y empezó a preguntarse si este fenómeno tenía lógica.  Jung partió de dos premisas:


1.- La llegada de una bandada de pájaros no causa la muerte de ningún ser humano.



2.- La muerte de un ser humano no atrae bandadas de pájaros.



Como le fue imposible dar una hipótesis de una relación causa-efecto entre los dos fenómenos, intentó identificar un tipo diferente de relación. A lo largo de sus propias observaciones, consiguió individualizarlo como una especie de vínculo, escondido a la atención normal de la mayoría de la gente. Y lo llamó coincidencia significativa o sincronismo. A partir de ahí desarrolló su teoría de la sincronicidad, que puede definirse entonces como una coincidencia significativa de dos o más sucesos en la que está implicado algo más que el puro azar. Dicho de otra manera, sería una coincidencia en el tiempo de dos o más acontecimientos, que no estarían producidos por la misma causa, pero que tienen el mismo o similar significado. Sin embargo, este significado sólo es comprendido por la persona que lo experimenta, y quien lo percibe y le presta atención suele sentir una extraña relación entre su universo interior y el exterior. Aunque, bien es verdad, que no todo el mundo le presta atención a estas coincidencias.




¿A cuántos de ustedes no les ha pasado de estar hablando o pensando en algo y, de repente, se les aparece de frente algo o alguien que tenga que ver con ello?. Pues eso es la sincronicidad. No obstante, hay mucha gente a lo que esto le parece una tontería, como a otra paciente de la que nos habla el mismo Jung, una joven con una mentalidad muy racional con la que le costaba progresar en el tratamiento, porque se resistía a asimilar ciertas ideas que le proponía él:

“Una joven paciente soñó, en un momento decisivo de su tratamiento, que le regalaban un escarabajo de oro. Mientras ella me contaba el sueño yo estaba sentado de espaldas a la ventana cerrada. De repente, oí detrás de mí un ruido como si algo golpeara suavemente la ventana. Me di media vuelta y vi fuera un insecto volador que chocaba contra la ventana. Abrí la ventana y lo cacé al vuelo.”

Era un escarabajo dorado que inmediatamente entregó a la paciente, la cual, ante lo insólito del acontecimiento, comenzó a percibir el mundo de otra manera. Lo curioso es que para los antiguos egipcios, el dios Khefri, representado como un escarabajo, es una figura arquetípica relacionada con la transformación del individuo.

Jung, además, se dio cuenta que las sincronicidades ocurrían más a menudo en períodos de cambios en la vida de las personas, como señales o mensajes en los que el sujeto percibe estar conectado a una realidad superior que engloba la suya propia. Esta realidad es la energía cósmica. La física corrobora este principio: somos un microcosmos dentro de un macrocosmos. Los elementos que forman los astros más lejanos son los mismos que forman todas y cada una de las células de nuestro cuerpo. Del mismo modo, nuestra energía y la energía cósmica son una misma cosa
Lo curioso es que lo que Jung y otros investigadores contemporáneos han intentado explicar de forma coherente con el método científico, es lo que la espiritual tradicional ya tiene claro desde la noche de los tiempos. La energía cósmica no es otra cosa que el Pranah de los hindúes, el Ka de los egipcios, el Qi de los chinos o los “ríos de agua viva” de los que habla San Juan Evangelista.

Visto esto, nos cabe preguntarnos por el motivo mismo de la existencia de la sincronicidad. Albert Einstein, al hablarnos de un Universo en el que el espacio y el tiempo son flexibles, nos da una pista sobre la explicación a este fenómeno. Cuando golpeamos una bola en una mesa de billar, desencadenamos una sucesión de rebotes entre unas bolas y otras, de tal modo que podemos llegar a recibir unos segundos después la misma bola que hemos impulsado. Igualmente, en un Universo de espacio y tiempo flexibles, donde la energía es una misma en todos los rincones, y donde nuestra mente y la Mente Universal son también la misma cosa, cualquier pensamiento que generemos con un significado concreto nos traerá, de rebote, una experiencia relacionada con ese mismo significado.

Las personas que practican meditación esto lo saben perfectamente. Cuando la mente se libera de las cadenas del racionalismo y se abre al flujo de la energía cósmica, las sincronicidades se multiplican en su vida cotidiana. Y esto nos lleva a hacernos una última pregunta: ¿podemos generar una nueva realidad cotidiana, y no sólo individual sino también colectiva, cambiando nuestra manera de pensar?. Yo, personalmente, no tengo la respuesta, pero citaría una breve frase del Evangelio de Mateo, que nos puede hacer reflexionar: 


“Vosotros sois la luz del mundo”
 (Mateo 5,14)

Y ustedes, ¿qué piensan de las sincronicidades?, ¿han experimentado alguna vivencia al respecto que les haya dejado sin palabras?, ¿o les parece que todo esto no es más que una sarta de patrañas? (jajajá). Bueno, les propongo hoy esto para que lo piensen. Y  les dejo con tres vídeos. El primero nos escenifica la anécdota del escarabajo dorado de Jung, el segundo es un fragmento del programa Cuarto Milenio del canal Cuatro de España, y el tercero es una canción de Madonna: "Frozen" cuya letra tiene mucho que ver con este tema. 



Saludos.

26 comentarios:

  1. Yo he soñado sin palabras y me despertaba para poner un diálogo a lo que soñaba.

    ResponderEliminar
  2. Nunca he percibido nada como lo que cuentas, aunque eso no significa nada. Nunca estuve en Pequín y en cambio ambos sabemos que Pequín existe.

    Yo tengo tendencia a creer que todo eso es posible, aunque no sepamos razonar el qué no el cómo, porque sé que sabemos muy poco del mundo, del universo en sí mismo, sé que muchas de las cosas aceptadas científicamente no son más que teorías medio corroboradas y que nuestra ignorancia es muy superior a nuestra sapiencia.

    Me ha encantado este artículo.

    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  3. Sr. Tequine, debo confesar que como siempre el tema que has tocado me ha encantado. También debo confesar que he vivido este fenomeno por decirlo de alguna manera. Resulta que siempre cuandohay luna llena algo malo me sucede, no me ha pasado dos ni tres veces, te hablo de muchas veces que he perdido la cuenta, ahora bien si el cielo esta nublado y la luna no se ve, no me pasa nada, pero es extraño, hasta ahora que he leido tu entrada, creí que esto solo era una locura mía.

    Besos.-

    ResponderEliminar
  4. Stultifer: ¿Tú también has soñado cosas raras?. Este es un fenómeno que hemos vivido todos, aunque no siempre le prestamos atención.

    Peace-for-ever: En una mente abierta todo es posible. Tienes razón en que muchas teorías científicas, por muy bien razonadas que estén, siempre dejan muchos cabos sueltos, y siempre pesa más lo que se ignora que lo que se medio conoce.

    Diego: No es para nada una locura. Somos parte del Universo, y todo lo que ocurre en el Universo nos atañe de alguna manera. En tu caso particular tendrías que ver en qué momento de tu pasado se iniciaron estas sincronías, y si la luna llena tiene algún significado particularmente para tí. De ahí podrías extraer conclusiones. Aunque, si quieres, te comento esto con más profundidad en privado. Pero ¿no te crecerán las orejas y los dientes y saldrás a dar mordiscos? (jajajá).

    Gracias, abrazos y besos para todos.

    ResponderEliminar
  5. Pues mira, cari... Esto te lo juro por lo mas sagrado y no lo vas a creer. Cuando estaba leyendo tu post hoy alucinaba, pues justo, justo esta mañana tuve una inspiración para un post que aún tengo que escribir que gira en torno a esto que cuenta de la sincronicidad. ¡Te lo juro! y si llego a escribirlo que le estoy dando forma ya te recordaré que me surgió este mismo día. Evidentemente no tiene nada que ver con tu post, es en plan historieta de las mías, pero muy relacionado con esto que cuentas.... ¡que curioso, te juro que alucino! Y lo peor, es que yo si que he tenido alguna de esas percepciones, pero no sabía que tenía nombre ni había oído hablar de ello.

    Hombre, yo creer mucho no creo, la verdad. Me cuesta pensar que un pensamiento que yo pueda tener afecte al conjunto del UNIVERSO. Es que eso es mucho decir. Yo creo firmemente que al universo los humanos se la soplamos, no se si me explico, jaaj. No puedo creer que todo esté puesto ahi para marcar nuestra vida, y me parece una vision muy antroporfica del mundo. En todo caso estará puesto para mi, jajaja. Y como tampoco soy religioso, a mi lo que diga la Biblia me la sopla. Claro los que creen que es un libro inspirado por dios pues se toman todo a pies juntillas, pero es que yo no creo en dios y menos en un dios escribiendo ese rollo de biblia en plan tan retorcido, jaaj

    Yo tengo un tío abuelo, que siempre pensó que el era gafe,-lo que creo que eso es otra sincronicidad. pensaba, por ejemplo que si el viajaba en tren a Cadiz, el tren descarrilaba y morian gente. Yo me meaba de risa pues me parece el colmo del egoismo, no? muerete tu, no mates a otros por ser gafe, jaaj.

    pero si que es verdad, que muchas veces piensas en algo o en alguien y de repente te aparece delante. Bueno, a ver si me pongo a escribir ese post.... jja


    Bezos.

    ResponderEliminar
  6. Thiago: Jajajá, ya me olía yo que cuando sacara este post "algo raro" iba a pasar. No te extrañes de ello, cari, porque estas cosas son más frecuentes que lo que la gente se para a pensar. También suele ocurrir que entre familiares, amigos, o personas que están en la misma onda haya cierta conexión telepática. Y ya sé qué eres ateo, cielo, y no es obligatorio creer estas cosas. Pero eso de decir que somos parte del Universo no me parece que sea una visión antropocéntrica sino todo lo contrario. En cuanto a la Biblia yo no la cito como creyente sino porque me interesa lo que pensaba la gente en el tiempo en que fue escrita, es decir, que me interesa desde el punto de vista científico, y desde ahí la intento interpretar. Y lo de tu tío abuelo, ¿no serían cuentos que se iventaba la gente cuando no había tele? (jajajá). Besos.

    ResponderEliminar
  7. Uhm, dos comentarios voy a hacer sobre este post. El primero de ellos es que yo, sinceramente, no me lo creo. O mejor dicho, es que no me pienso permitir creerlo, las cosas deben poderse demostrar o no dejan de ser elucubraciones. Porque a mí se me ocurre una explicación mucho más racional que explique el caso de la señora X, y es que probablemente la señora X haya percibido los tres días que le llamaron la atención los pájaros, algo de algún modo inconsciente que le indicaba que sus allegados estaban muriendose. Algún gesto de dolor, algún color cetrino, alguna mueca, acto, comentario... que le llamó la atención y que ella de modo inconsciente acabó asociando a algún otro hecho anecdótico que le resultó más llamativo de un modo consciente. Luego es cuestión de repetir la situación y el -falso- recuerdo queda fijado como verdadero. Pero estoy seguro de que hubo más veces que vio los pájaros en su balcón y no le llamaron la atención o, simplemente, ni siquiera los vio, a lo mejor porque no fue a mirar a ver si estaban. Esa explicación me parecería más plausible.

    En segundo lugar, un comentario más breve, y es justo ese, que breve, lo-que-se-dice-breve el post no te salió, jajajaja. :P

    ResponderEliminar
  8. Eso de la sincronicidad nos sucede a aquellos que somos capaces de "apreciarlo", y no por eso somos mejores ni peores, no quiero que se me entienda mal. Yo no creo en lo casual y pienso que todo tiene una causa. Ahora tendré que estar más atento a la sincronicidad de ciertas cosas.

    Un saludo para ti y otro para Jung.

    ResponderEliminar
  9. Z: La intrepretación que das de la experiencia de la señora X es bastante convincente. Lo cierto es que ella intuía la muerte de personas cercanas con las que convivía y seguro que notaba fácilmente sus cambios de semblante. Por ahí también podríamos seguir la pista, pero Jung era como era y siempre se iba al lado oscuro y misterioso de las cosas. Yo, de todos modos, no soy abogado de Jung, pero me interesa esa forma tan heterodoxa y a la vez tan razonada de encontrar explicación a este tipo de experiencias. Y en cuanto a la "brevedad" del post, ya ves también en los demás anteriores que tengo un cierto estilo enciclopédico. Por eso dejo siempre la opción de ver la "película" para quien lo le apetezca leer el "libro" (jajajá).

    ◊ Dissortat ◊: Me encanta que un tío de ciencia como tú sea de los que sepan apreciar este tipo de sucesos. Yo creo que andas bastante acertado en el sentido de que hay gente que percibe estos fenómenos pero no les da la mínima importancia, y no tiene nada que ver con ser más listo o más tonto. Y si estás atento a las sicronicidades es posible que descubras cosas asombrosas. ¡Feliçes festes!.

    Saludos y besos para todos.

    ResponderEliminar
  10. Cari, qué tal el finde, sincronizaste? Por cierto, que el otro día me había olvidado de decirlo. Que ya sabes que yo no soy muy de divas y tal, ni soy el tipico gay fans de Madonna, Lady Gaga, Rihana, Beyonce´y compañía, pero que está canción de Madonna me encanta desde que la escuché por la primera vez... sin saber que era sincorinista, jajaa

    Bezos.

    ResponderEliminar
  11. Las he experimentado demasiadas veces y nunca para nada bueno, o será que sólo se nos quedan clavadas las que más nos marcan y esas siempre son las negativas.
    Pero sí, las he vivido.
    Preguntas si el cambio de actitud de individuo puede cambiar el entorno, no cabe duda.
    Una experiencia personal: llegué a mi barrio con 3 años y a los 30 no me saludaba nadie de menos de cincuenta. Por otras causas tuve que hacer terapia y leerme un montón de libros de autoayuda. Yo no hice nada pero mi actitud ante el entorno cambio y un montón de jóvenes empezaron a saludarme. Y así podría contar mil cosas pero también hay que tener en cuenta que cambia nuestra percepción no sólo el entorno y ya ahi no sé donde cambia qué
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  12. ¡Fascinante! Mira que yo soy como la chica del escarabajo, incrédulo por naturaleza pero con tu post me has hecho estar abierto a la posibilidad. Cosas que en pasado parecían de ciencia-ficción hoy tienen su explicación racional. Recuerdo que de niño, en el pueblo de mi padre, una señora mayor me dijo que si un cachorro de gato tenía tres colores es que era una hembra. Yo pensé que eran bobadas de vieja hasta que en clase de biología me dijeron que genéticamnete sólo las gatas pueden tener tres colores diferenciados. Obviamente la señora no tenía comocimientos de genética, pero el saber popular había llegado a la explicación correcta por otros medios...

    Nunca me ha pasado nada misterioso. Una vez, estando con mi familia en el pueblo, pasé por el pasillo de la casa y pude ver perfectamente a mi abuela sentada en el sillón haciendo ganchillo. Por entonces, mi abuela estaba viva y no había venido al pueblo con nosotros en esa ocación. Fue algo raro de mi mente. Si hubiera estado muerta, me habría cagado en los pantalones... jajaja

    He leído el comentario de Thiago y me ha acojonado un poco. Ten cuidado no sea que su espíritu te posea y luego tengamos que llamar a un exorcista, jajaja

    A Lady Gaga, Beyoncé y Rhiana os las dejos. Pero en Madonna os gano a todos, jajaja

    Besos Rober...

    ResponderEliminar
  13. ¡Coño, nuevo encabezado, cari! jajaaj

    Bezos.

    ResponderEliminar
  14. Joaquinitopez: Esas experiencias no me cabe duda de que son muy comunes, aunque, como tú bien dices, guardamos más en el recuerdo las que tienen un contenido negativo; es así como funcionamos. Y en cuanto a cambiar nuestra actitud ante la realidad, es cierto que, de alguna manera, cuando proyectamos sentimientos positivos nos bienen de rebote también sensaciones en esa misma línea. Y ya ves que hasta la física moderna, que se va pareciendo cada vez más a la metafísica, tiene explicaciones para ello, aunque deja muchas dudas.

    Inqueerer: Precisamente, cuando redactaba lo de la chica del escarabajo me acordaba sólo de tí, ¿por qué será?, jajajá. Yo soy de los que no me creo nada si no tengo una prueba o un motivo más o menos claro para ello. En cuanto a lo de las gatitas, me estoy enterando ahora: algo nuevo que aprendo. Y es verdad que la ciencia descubre cosas que el saber popular ya conocía desde hace mucho. Y bueno, ese tipo de experiencias se suelen tener en cuenta cuando son repetitivas, porque de una sola vez puede ser una falsa percepción, aunque es posible que vieras no a tu abuela sino a tu bisabuela, que ya sería para tenerle respeto a la cosa (jajajá). En cuanto a Thiago, yo creo que su espíritu nos tiene poseídos a todos, es una auténtico "meigo" (jajajá). Y, finalmente, aparte de Madonna, nombras a otras que no me suenan de nada..., no sé ni quiénes son (jajajá).

    Thiago: Sí, cielo, ya ha llegado la primavera (jajajá). Y he puesto una cometa perdida en un bosque de laurisilva, y creo que guarda mucho simbolismo, ¿no crees?. También el fondo es nuevo, y las barritas separadoras, que a mí también me gusta cambiar de camisa (jajajá).

    Abrazos y besos para todos.

    ResponderEliminar
  15. AJJA-JA-AJAJJA KARI YO A VEZES VENGO Y NO SÉ PARA KE VENGO, PQ TE TENGO MUCHO KARIÑO Y ERES UN CIELO KON LAS KOSAS KE ME DIZES Y TODO PERO LEO LO DE LA SINCRONIZIDAD Y ME KEDO TOA LELA Y ME DIGO A MI MISMA "FASION SI NO VAS A DEZIR NADA DE FUNDAMENTO, LE DEJAS UN BESITO Y YA ESTÁ NO LE KUENTES TU VIDA" Y ES KE YA SABES KE YO SOY POCO PROFUNDA Y NO DEMASIAO ILUSTRADA, AJAJA Y VAYA ME HE KEDAO KON LA COPLA DE LAS COSAS KE SUZEDEN AL MISMO TIEMPO SIN KE OCURRA NINGUNA RAZÓN APARENTE Y MIRA, MIENTRAS LA VANE ESTABA DÁNDOLE AL ACEITE CON EL MAIKEL EL MORTADELO KE ES EL GATO DE MI MADRE SE ESTABA CHINGANDO AL GATO DE LA VECINA DE PATIO KE TENEMOS ( PERDON DIJE GATO Y ES GATA, KE CREO KE MORTADELO NO LE DA POR AHÍ AUNKE KON LO SALIDO KE ANDA TODO SEA KE NO SE ZUMBE AL CANICHE DE LA DEL TERZERO Y LE DEJE EL RECTO KOMO EL KANAL DE LA MANCHA,AJAJA), KE SABEMOS KE FUE LA MISMA NOCHE PQ LOS GATOS YA SABES KE ESKANDALOSOS SON KUANDO PRACTICAN SUS INTERIORIDADES SEXUALES Y FIJATE KE KASUALIDAD CUATRO SERES TAN PEKULIARES DALE KE TE PEGO EN UNA MISMA NOCHE, AJAJAJA, PERO KE COSAS TE CUENTO KE NO TIENEN NADA KE VER CON EL ESKARABAJO A KE NO, CIELOOOOOOO....UN BESAZOOOOOOO

    ResponderEliminar
  16. Fassion: Pues habría que investigar a ver por qué a todas la "fieras" les dio por hacer lo mismo a la vez, quizá era cosa de la energía cósmica, jajajá. Un besazo para tí también, linda.

    ResponderEliminar
  17. en la vida pazan kozas algunas inespicables lejos del razonaminto para personas bloquiadas a entender o porlo menos a esforzarce. yo era de la personas que vea las cosas siempre como coincidencia pero ahora medoy cuenta de todo lo contrario, solo tenemos k razonar 1 poco y abrir mas la mente y los sentidos y dejar k el tiempo transcurra para atadar cabos y darnos cuenta de la verdadera realidad, por que las cozas pazan por algo y ese algo a nosotros nos toca desifrar.

    ResponderEliminar
  18. Anónimo: Hay muchos acontecimientos que sólo le podemos encontrar explicación abriendo nuestra mente, y creo que nuestro razonamiento no es completo si nos cerramos, si nos quedamos atrapados en cuatro ideas. Y la ciencia poco a poco va abriendo caminos donde hasta hace bien poco se consideraba terreno de la superstición. Y tienes razón, que abriendo la mente y los sentidos llegamos a percibir cosas que hasta ahora ni habíamos tenido en cuenta, y no necesitamos que nos llegue volando un escarabajo dorado. Como dice Madonna en su canción, la llave la tenemos nosotros. Saludos y besos.

    ResponderEliminar
  19. Hola Mr. Tenique.

    Bueno me haz dejado perplejo, simplemente me encanto tu entrada, hoy me provocaste un quererte barbaro.

    Alvaro

    ResponderEliminar
  20. Álvaro: Gracias, yo también te quiero, jeje. Bueno, Jung es siempre sorprendente. Como ya he dicho a otros, lo que más me gusta de él es que no cierra la mente a otras formas de entender y explicar los fenómenos que, en principio, se escapan a la comprensión humana. Y ya ves cómo la ciencia va descubriendo cosas que la espiritualidad tradicional explica a su manera. Jung también nos enseña a hacer caso de nuestras intuiciones,y prestar atención a nuestros sueños y nuestras corazonadas, porque en ello puede estar la clave que explique nuestra propia presencia en el mundo, y nos pueden dar una pista a la hora de tomar decisiones sobre nuestra vida. Besos.

    ResponderEliminar
  21. Mas de una vez me han ocurrido "coincidencias". Muchas veces estar pensando en alguien y que esa persona me llamara, que es bastante común. Una de las últimas: iba camino a la facultad y debía llevar un globo para la clase, se me ocurre preguntar si vendían en un kiosko cercano y mientras iba pensaba (riéndome por dentro) : hola, traje un globo verde loro". Efectivamente en el kiosko vendían globos y el que me dió el vendedor fué verde loro... Otra que me impactó este año fué toparme muy seguido con cosas directamente relacionadas al budismo y a los estados de conciencia alterados (libros, personas en la calle que me invitaron a proyecciones de documentales, invitación a meditación..y así).

    ResponderEliminar
  22. Hola. pues yo le conté a mi viejo del escarabajo dorado de Jung el otro dia, tipo diez de la mañana y tipo ocho de la noche voy hasta mi cuarto y en la punta de la cama sobre una toalla hay un escarabajo dorado.

    ResponderEliminar
  23. Ayer entré a una galería que no voy nunca buscando una peluquería que me recomendaron, y voy caminando y de repente no siento las piernas, y me digo pff que me sucede, giro mi cabeza y a mi izquierda hay un local que no había mirado donde venden piedras, de lo cual me estoy metiendo en el tema. conseguí un colgante con las 7 piedras de los arcangeles. pq ellos se están manifestando demasiado y me vibro una piedra y la compré, es ojo de tigre, color pardo que es un color que me aparece en todos lados. tipo el 7 al 9 de noviembre explotaba mi cabeza de señales que mi ángel cuando yo era chica se llamaba y se llama Ariel, lo venía sintiendo y de repente se me aparece en la calle un artesano me dan muchas ganas de charlar con él, le compre unas pulseritas y me regala una piedra fluorita verde y violeta, y me dice que él se llama Ariel. vengo a googlear y me sale que el ángel Ariel es para los nacidos en la fecha que les acabo de contar. el artesano me dijo tejer es muy lindo pero hay que se PILLO para tejer con colores. los colores me comenzaron a aparecer a fines de octubre. y tejer los hilos de la vida es una analogía que me gusta mucho por estos días.

    ResponderEliminar
  24. La semana pasada, supongamos un viernes, estaba leyendo un poco de todo en internet y encontré el libro Mujeres que corren con lobos, guardé la pagina en favoritos para algún día leer el articulo y ver si luego lo consigo. al otro día, posta menos de 24 horas, la chica que vive conmigo aparece con dos libros húmedos y pisoteados por autos que se encontró en la calle. uno de ellos Mujeres que corren con lobos, obvio luego de lo que le conté y mostré en favoritos me lo regaló.

    ResponderEliminar
  25. no pertenezco a ninguna religión, pero hoy con mis 32 años me he dado cuenta que todas las mitologías nos sirven para llegar a lo que necesitamos. hoy por ejemplo me estoy guiando con los ángeles hasta poder llegar a otra cosa que me interese o me vibre mejor. sé que siempre soy yo y el cosmos. éso tan complicado de entender. el otro día una amiga de una amiga le conté un par de cosas de los sincronismos que me suceden, y me dijo ya DESPERTASTE.

    ResponderEliminar
  26. Señor Rober Tenique, muchas gracias por su artículo! Lo disfruté mucho, me robó varias sonrisas. Tal como le ocurrió a Jung y a su paciente, todos hemos experimentado Casualidades, solo que para la mayoría de las personas es como dice Madonna en la canción "...you only see what your eyes want to see". Hoy después de encontrarme con una Casualidad increíble, abrí al azar una página del libro "Casualizar" del Señor José Luis Parise en donde hablaba de La Leyenda del Escarabajo Dorado. Deseando informarme sobre esa leyenda en internet, llegué a su artículo por casualidad. Le recomiendo el libro que recién mencioné y también en youtube, la entrevista con título "La Lógica del Azar, Suerte y Destino". Saludos!!

    ResponderEliminar

Usted dirá...

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...